Los sueños son para soñarlos, no para cumplirlos.
Cumplidos son un orgullo que con los minutos vuelven insípido.
¡Vacíe su bolsillo, dama; pierda su cartera, caballero!
Aquí hay más para los que quieren menos.
Llenémonos de sueños, ilusiones, fantasías, ficciones, y vamos a tener el corazón repleto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario