Ciclocircocircunferencia





 Todas las hojas en blanco invitan
y cada hueco es oportunidad.

Dejarnos pasar, entonces,
no es error
ni omisión
ni sumisión;
es decisión
alteración
construcción
revelación.

Pero no me animo a dejar pasar
y eso sí puede ser un error.

El devenir devendrá,
y me llevará con él
como hace el viento con las hojas secas,
como hace el cuerpo con la piel muerta,
como todo ciclocircocircunferencia
sin término ni comienzo,
sin parpadeo ni silencio,
circulando sin titubeo
ahí por donde no hay que rendir cuentas
ni hacerse cargo de sus injusticias
ni sufrir retrasos y ausencias
latiendo por sinrazones de inercia,
aquel empujón que desató esta cadena
que se ata a mis piernas
que me imanta y me arrastra
hacia las mismas calles desiertas.

Lo único que me cura del pánico
del futuro pálido
de la quietud histérica
del reflejo clásico
de la negación acérrima

es cómo cae todo caos circundante cuando canto.

No hay comentarios: